miércoles, 10 de octubre de 2018

Bathory


En un ámbito musical donde la escala de influencia tiene poco que ver con el éxito comercial, pocos creadores de las artes del metal extremo evocan un profundo sentido de misterio, o incitan tales tonos de admiración tan silenciosos y reverenciales, como Bathory de Suecia . Esencialmente una operación de un solo hombre, dirigida por el misterioso Quorthon , el desarrollo de Bathory desde la forma de Black Metal, embrionario hasta el golpe, la muerte y de regreso a su propio Black Metal con temática vikinga, ha reflejado y definido regularmente el género.De hecho, junto con Celtic Frost de Suiza, Kreator de Alemania y Mercyful Fate de Dinamarca, se califican fácilmente como uno de los actos de metal extremo más importantes de Europa de los años 80 y 90. El multiinstrumentista de origen sueco Quorthon (también conocido como Black Spade y / o Ace Shoot , aunque su nombre real es Thomas Forsberg ) formó Bathory en 1983 con Sidi Hanoi (bajo) y Vans (batería) . Estos dos pronto serían expulsados, sin embargo, tan pronto como hubieran completado el trabajo en dos de las mejores pistas escuchadas en la ahora infame compilación del ataque al metal escandinavo de 1984 . Influenciada por todas las formas de speed metal conocidas por el hombre en ese momento (lo que, ciertamente, no era mucho), Bathory pronto planteó una afirmación como la respuesta de Escandinavia a Motörhead y Venom (de cuya canción "Countess Bathory" obtuvieron su nombre). Y, al igual que en los primeros trabajos de Venom , Bathory también se vio desafiada por las condiciones de grabación absolutamente primitivas de Heavenshore Studios (en realidad, se convirtió en un garaje para automóviles y en un espacio de almacenamiento), limitaciones que establecen inadvertidamente la plantilla aproximada e intransigente que luego fue cuidadosamente examinada y aceptada como gospel de generaciones de músicos black metal-metal. De hecho, el debut homónimo de 1984 y su sucesor de ideas afines, The Return de 1985 eran tan inaccesibles, tan inauditos en su abrasivo anti-comercialismo, que se adelantaron a su tiempo, haciendo un nicho propio en este subgénero de rápido desarrollo. Curiosamente, la curiosidad adicional que Bathory rara vez toco en vivo (y nunca, después de 1985), y que estas grabaciones no proporcionaron casi información sobre sus constituyentes (que, aparte del hombre principal Quorthon , incluyó brevemente a varios bajistas y bateristas anónimos que fueron seguidos por los apodos Kothaar y Vvornth ) solo se añadieron a su mística de culto a lo largo del tiempo. Ni siquiera este comienzo prometedor fue suficiente para sostener a Bathory. Sin embargo, el impulso dentro de límites estilísticos tan limitados y, después de agotar las posibilidades del Black Metal rudimentario con sus dos primeros esfuerzos, Quorthon se dio cuenta de que era necesario un estiramiento facial creativo. Por supuesto, en el transcurso de su tercer y cuarto álbum, la transición de 1987 Under the Sign: The Sign of the Black Mark y la cuenca de 1988 Blood Fire Death , Bathory volvió a enfocar sus intereses, lejos de los arreglos basados ​​en el rock & roll y hacia una estética más puramente europea. Incorporando gradualmente elementos sinfónicos extraídos de la música clásica en su base de black y death metal, en el momento de Blood Fire Death Quorthon abandonó la mayor parte de la rota lírica satánica / violenta de antaño, y abrazó los temas paganos y la mitología vikinga de sus antepasados. Este enfoque antémico culminó en lo que muchos consideran que es el mejor hito de Bathory , el concepto hito de la década de 1990, Hammerheart . Parte del salto cuántico, parte de la continuación de los bocetos de Blood Fire Death , el álbum de ninguna manera recordaba los humildes orígenes de Bathory , y proporcionó el arquetipo para el casi creído Crepúsculo de los dioses de 1991. Confirmando el impacto de esta visión, estos tres trabajos ayudaron a encender una oleada de patriotismo a través de la música de innumerables jóvenes escandinavos, quienes posteriormente comenzaron a celebrar su herencia cultural pre-católica. Lamentablemente, aunque encomiable por alentar una escena local autocontenida y altamente inventiva (con Mayhem , Emperor , Darkthrone etc), Este movimiento también sembró las semillas para futuros actos de odio vandalismo (tan absurdos como reprobables) y el asesinato absoluto, manos de un pequeño contingente extremo. 

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